Aún ejerciendo la tolerancia no se deja de distinguir lo malo y lo bueno.
La torpeza viene acompañada del temor.
Para entender a otro se necesita darle tiempo para que se dé a entender.
Aún no teniendo porque comprender a todos es necesario considerar que el otro es un igual en sus equivocaciones a uno.
Incluso la palabra ruido causa molestia.
La pureza y la dulzura son silenciosas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario