Dentro de los artículos de este blog, está la información sobre un Seminario dictado por un médico psiquiatra norteamericano, que hizo hincapié como es que la enfermedad silenciosa llamada depresión, podría terminar si quien la padece, hiciera saber cuál es el motivo de su padecer... porque detrás de quien sufre encerrándose en si mismo, en no querer hablar y buscar esa soledad enfermiza, existe un motivo que lo atrapa.
El especialista recomienda que si el enfermo compartiera su pasaje oculto de tristeza, podría ayudar a quiénes le siguen de su familia, no se contagien con el misterio de esa tristeza que aparentemente no tiene explicación.
Dijo, hacer una reunión familiar con música clásica en un ambiente de armonía, donde compartir algo sencillo por servirse, para una vez a la semana, cada uno haga saber aquello que no nos es fácil hablar y que sin embargo no causa más que un misterio para sufrir en soledad, podria permitir que todos entiendan que nos afectan situaciones que no nos atrevemos a confiar de la historia familiar o algo personal que quedó sin resolver y que es parte de lo que nos ocurre porque sí.
Un dolor emocional un mal recuerdo no puede impedir seguir viviendo la vida, un peso silencioso en la existencia humana no es una experiencia exclusiva de una persona, compartirlo servirá para que los otros componentes de la familia confíen en compartir sus angustias y así en conjunto poder romper con esas cadenas mentales, para liberarnos de cosas que no son más que cosas de la vida.
PD. Si en el encuentro hay alguien que pueda hacer un Padrenuestro y dar gracias por estar unidos, mejor.
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