El tratamiento farmacológico sabemos que es de por vida y que ayuda a lo estable, además de evitar no volver a recaer… pero la
manera de enfrentar y aceptar este cambio de vivir una nueva realidad, requiere
de la ayuda de un profesional de la psicología, para refrescar ansiedad y tensiones,
las que se acentúan con esas constantes inclinaciones
de desconcierto.
La psicoterapia, refuerza al paciente en la posibilidad de ordenar sus ideas confusas, motivandolo a enfrentar su responsabilidad en revisar, reconocer y
aceptar que de él depende conseguir cambiar su modo de pensar, sentir y actuar;
la enseñanza del profesional es una orientación
y ayuda a observar la problemática de la persona, pero el logro y provecho de
ese apoyo, depende únicamente de la capacidad
de “reflexión, prudencia e interés de madurez” de quien busca aliviar sus confusiones.
Persevera, no falles a tus citas, no cuestiones al profesional, cuestionate tú, se constante y no esperes que te den las respuestas, nada impide que tu disciernas, que distingas entre dos alternativas y saques una conclusión, para conseguir lo que buscas lograr, ser mejor.
Persevera, no falles a tus citas, no cuestiones al profesional, cuestionate tú, se constante y no esperes que te den las respuestas, nada impide que tu disciernas, que distingas entre dos alternativas y saques una conclusión, para conseguir lo que buscas lograr, ser mejor.
Qué es
Disciplina:
"La disciplina es
la capacidad de las personas para poner en práctica una serie de
principios relativos al orden y la constancia, tanto para la ejecución de
tareas y actividades cotidianas, como en sus vidas en general.
En este
sentido, la disciplina supone la capacidad para controlar los
impulsos, sobre todo aquellos que nos apartan de los objetivos y más bien nos
inclinan al goce de los placeres más inmediatos. De allí que la disciplina sea
muy importante a la hora de alcanzar metas arduas, tanto a nivel personal, como a nivel laboral".