lunes, 28 de agosto de 2017

¿Qué significa lo que estoy pensando?


 La bipolaridad llama a preguntarse, a repreguntarse y muchas veces a no encontrar respuestas.

Cuando compartimos nuestras problemáticas, nos encontramos con planteamientos como el de algunos pacientes que  creen en Dios, pero lo culpan que no los escucha y si se analiza la influencia de una fuerza espiritual del mal, consideran que no tiene relación con la enfermedad; entonces, si no es lo uno ni lo otro en relación a lo espiritual,  lo que queda por inventar es el “cómo hacerse cargo de sí mismo” tal vez la propia rectitud o voluntad sirva de motor, para encontrar algo que no sea solo seguir dándole vueltas a lo que se siente.


No es bueno dejar de entregar comprensión y apoyo al paciente, pero en definitiva si no encuentra respuestas afuera, algo tendrá que hacer en última instancia “con su presentimiento” sí, con esa sospecha a que algo va a ocurrir, qué es lo que todos sentimos como raíz de la enfermedad.

Si nos fijamos "donde se aloja el dominio de los que nos aflige, sin duda es en lo que pensamos"; el pensamiento del paciente bipolar es reiterativo a veces repetitivo, en milésimas de segundos se generan o generamos múltiples pensamientos y nuestra mente pasa a ser la fuente de ideas enfermizas, las que tienen el poder de convencer lo inútil que es concretar una función, como realización personal.

Es así como este pensamiento descontrolado, desordenado, sin la auto observación de preguntarnos ¿Qué significa lo que estoy pensando? impide incluso "respirar profundo" un "factor básico para alejar el pensamiento" la angustia y el miedo.

Tenemos la capacidad para cambiar lo que estamos pensamos, como también dejarlo pasar, es tiempo de empezar a tomar control de saber qué es lo que gira en la propia mente  y de saber "qué pensamiento me hace bien o mal" cuando ni siquiera eso puedas lograr, respira profundo/exhala lento, respira profundo/exhala lento, respira profundo/exhala lento.

Mientras no encuentres lo que te ayude a hacer en ti una verdad, poco pueden hacer por ti los demás.


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