Hacerse cargo de las propias responsabilidades, es una tarea
beneficiosa para uno mismo.
En relación a los medicamentos entre
pacientes existe la tendencia a preguntarse: ¿ Qué tomas tú? y lo
cierto que eso no sirve de nada, porque en la bipolaridad no existe un
medicamento para todos por igual.
Los medicamentos que decide el médico "especialista en
bipolaridad" es lo que vale, en psiquiatría los medicamentos son
denominados "estabilizadores del ánimo", los que son recetados en
sentido absolutamente personal; una muestra de ello es que no es tan fácil que
se encuentre el tratamiento adecuado asistiendo a cualquier médico.
Este diagnóstico nos exige educarnos con respecto a
muchos factores, entre todos esos, tomarnos en serio.
Es necesario considerar que al tener molestias de poca
tolerancia con los medicamentos, consultar al médico y no abandonar al médico y al tratamiento; los medicamentos nos
exigen ser disciplinados, generalmente el consumo de ellos son cada 12 hrs. y
la razón es mantener recubiertas las propias neuronas, ellas dependen de
nuestro propio hábito, para no repetir una crisis.
Existen químicos para la bipolaridad, que aún siendo
excelente estabilizador del ánimo, requiere estar bajo control constante por el
médico tratante con exámenes; el tratamiento siempre estará sujeto a aumento o bajas de
dosis, en el tiempo todo pasa a ser una rutina y no parte de una enfermedad,
creo que cuando nos hacemos cargo y aceptamos lo que traía el destino, no
hay que tomar el mundo de la bipolaridad con conformidad, sino con
reponsabilidad del día a día, lo que nos permite estabilizarse y aprender a vivir.
La bipolaridad es una de las enfermedades de mejor
pronóstico en psiquiatría si el paciente sigue las indicaciones médica, si
aprende a evitar lo que le provoque conflictos y si valora ante todo el
reconocer dónde encuentra su bienestar personal.
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