Varones con Algún Diagnóstico Afectivo.

Esta vez quiero referirme a los pacientes varones con algún diagnóstico de bipolaridad o depresión en base a mi apreciación personal, con el propósito de aportar a quienes no saben cómo ayudar a un cercano, incluso, personas que viven fuera de Chile.

Alguien escribe así: "A mi novio le cuesta dormir, le afectan situaciones de su trabajo produciéndole estrés, sufre de ansiedad, siempre parece estar en estado depresivo, está decaído, no quiere ir a trabajar. Somos una  pareja que lleva tiempo juntos, pero esta situación nos lleva a discusión y no logramos estar de acuerdo...se que Ud. no lo puede diagnosticar, pero necesito una guía o un consejo para ayudarlo sin hacerle sentir mal ni culpable" Consuelo.

Cada escrito de este blog, puede servir en un sentido general, para tener una idea básica de cómo se presentan los estados y qué poder hacer en caso dé, puedo decir en base a mi continuo compartir con otros iguales en el diagnóstico, que no hay grandes diferencia en los síntomas entre varones y mujeres, lo que sí hace la gran diferencia, es en cómo enfrenta su propia realidad afectiva un varón de una mujer.

Lo que he llegado a apreciar es que un hombre se debilita más aún, tal vez, por su naturaleza, su condición está relacionada con la sobre protección y proveedor, al experimentar decaimiento, ansiedad, insomnio, se debilita y padece de mayor falta de seguridad en su comportamiento.

Sin embargo a todos los varones a quienes he conocido con tratamiento, su condición de persona no cambia, incluso dentro de las experiencias en los encuentros, bien escuchadas y recibidas son sus opiniones, porque sus enseñanzas unidas con las femeninas hablan de lo mismo, comúnmente los varones no demuestran sus sutilezas, sus penas, sus profundos sentimientos o sus temores, cuando compartimos nos enteramos de lo qué les ha afectado la crianza familiar, las limitaciones económicas, el haber perdido un gran amor y tantas otras historias que afectan a unos y a otros  de manera tan similar, afectándonos y llevándonos a seguir un tratamiento; y es así como queda demostrado que un sentimiento, toca de la misma manera en lo femenino como en lo masculino.

Para sosegar el dolor, lo mejor es compartirlo.

El "desconocimiento" sobre lo importante que es la ayuda médica y a veces psicológica, impide que la persona en este caso los varones, mejoren esos estados de debilidad, perdiendo fuerza en su persona, en su trabajo, en su toma de decisiones, solo por una creencia equivocada que dibuja en su propia mente, impidiéndole normalizar los estados que lo están perjudicando.

Son muchos los varones que pierden su capacidad de independencia por no asistir a un médico, a veces, pareciera ser necesario no decirle qué debe hacer, más bien ponerle una "condición firme y segura" de alguien que para él sea importante y así reaccione.

Cuando se trata de sentir, no hay diferencia de género.

Cuando se trata de crecer si se quiere, varones y mujeres crecemos.

Cuando se trata del amor, es igual en lo femenino y masculino.

Cuando se trata de la salud para todos es lo mismo.

¿Entonces? hombres y mujeres el sentimiento, el dolor, la incertidumbre, la pena, el miedo, lo vivimos por igual y por igual, cada cual puede comprobar que no somos lo que pensamos o lo que los demás piensan lo que somos, cada día somos la búsqueda de la propia superación.