¿Quién nos Enseña o nos Perjudica? Nosotros Mismos.

Cuando nos proponemos avanzar o crecer, pensando en mejorar nuestra vida, es común que esta buena idea se vea representada por nuestras amarguras.

Enumeramos todos los imposibles, lo difícil, lo complicado, revisamos todos los problemas que hemos tenido en  el tiempo y en el último tiempo, lo mal que nos ponen las preguntas desatinadas, la frustración, la decepción, el no poder desconectarnos, describimos las expectativas no cumplidas, los miedos, el último fracaso amoroso, aseguramos que no existen los sueños, las tentativas todas son una ruina. etc. etc., la lista más extensa y clara es en base a lo no cumplido.

A esas alturas, ya nos hemos olvidado en lo que estábamos..., estábamos proponiéndonos avanzar, crecer, para vivir mejores días.

Enumera o escribe lo bueno que te trajo este día y espera a lo que vendrá a hacerte buena compañía.