Tantos años con tratamiento para la bipolaridad que mi intención de orientar, apoyar y demostrar lo posible que es sacar buenos resultados del esfuerzo por lograr la estabilidad emocional y la salud mental, cada día es más evidente en mi realidad de vida.
De todo he aprendido, todo me ha servido, la psiquiatría, la psicología, el espejo de mi casa cuando me siento algo distinta y frente a él me llamo la atención con firmeza para no salirme de mi centro, la voluntad para cambiar hábitos, conductas y abandonar la impaciencia, todo eso me ha demostrado que todo estaba en mí para mejorar, porque ¿quién puede hacer lo que a mí me corresponde?
Reconocer que los miedos tienen dominio absoluto sobre la paz interior hasta lograr las descompensaciones, ha permitido cambiar mis miedos, por aprender a respetar mis derechos, mis cualidades, buenas intenciones y principalmente mi dignidad.
Confiar en mi capacidad de comprender que los demás critican, enjuician y a veces hasta envidian como parte de la normalidad de vida, me permite no poner mayor valor en ellos, que en mí y a entender que aunque alguien lo quiera, ni yo misma, puede derribar mi esencia, mis verdades, mis equivocaciones, mi timbre de voz, como tampoco lo que nace de mí como opinión o la capacidad innata de pensar, porque mientras esté de acuerdo con lo que he elegido como bueno, es suficiente para complacerme, felicitarme, admirarme y disfrutar de esta vida pasajera.
UN HOMBRE TIENE QUE TENER SIEMPRE EL NIVEL DE LA DIGNIDAD POR ENCIMA DEL NIVEL DEL MIEDO.
Eduardo Chillida (1924-2002) Escultor y grabador español.
Hola Susana que buen comentario ni que me hubieses adivinado el día, como siempre tus palabras cobran vida en mi diario vivir, en mis experiencias y además tu propia sinceridad y claridad te lleva a relatar claramente el sentir y pensamiento de quienes te leemos. Con cariño y un abrazo enorme, pues te extraño y extraño ver a quienes como algún día llegaron al hospital perdidos como yo queriendo escuchar el consejo que nadie más que un bipoolar le puede dar, pues no es consejo, sino "vivencia".
ResponderEliminarRoxana....tu amiga....
Roxana perdí la cuenta del tiempo que no te he visto, pero te recuerdo siempre por la gran persona que eres, gracias por tu comentario. Somos muchos los que nos hemos sentido perdidos y es verdad que las vivencias de otros nos sirven, para darnos cuenta que seguiremos estando presos de las angustias, mientras no nos demos permiso para hacer cada uno de su vida algo diferente.
ResponderEliminarA veces quisiera encontrar sólo una frase para hacer entender que es posible recuperarse de este desorden del ánimo, cada vez más, me convenzo que la sanación está en aprender a pensar más que a sentir, a estar de acuerdo con uno mismo, para cambiar los miedos por la satisfacción de ser como soy, porque no deberíamos dudar que lo primero es, reconocerse que cada cual es lo mejor para sí mismo.
Desde este Lunes 3 de Marzo 2014 retomo los encuentros en el Policlínico de Psiquiatría del Hospital del Salvador de 14:00 a 17:00 Auditorio N* 1 nos vemos.