Hace pocos instantes, terminamos de reunirnos en una de las casas de alguien que no acostumbra a recibir visitas. Cada quien puso ingenio para compartir algo especial y así servirnos y hacer un brindis por la amistad y por la vida.
Aunque acostumbramos a compartir los días lunes, cambió el entorno y también nuestra actitud, la acogida de la anfitriona quien de constantemente sentirse sola y sin ánimo, hoy todo en ella nos sorprendió, desde su presencia muy linda, su hogar luminoso y con gran dedicación para recibirnos, nos sorprendimos de encontrarnos con una María Luisa distinta, lejos de verse como generalmente se le ve, triste.
Es tan fácil comprobar cuán equivocados vivimos al no hacer algún giro ante lo que estamos convencidos que es nuestra única realidad, sentirnos solos pareciera ser ley en nosotros, romper con eso, fue crear una situación nueva y generosa para disfrutar de algo posible y transformarlo en realidad, es verdad que aquí de un alguien que propuso crear esta reunión en casa de María Luisa, pasó a ser todo una fuente de deleite principalmente para ella y para todo los asistentes.
La conversación entre dos en dos, de un momento a otro cambió y generamos una visión particular sobre qué pensábamos ante la Alegría de Vivir, y así giró y giró en algunos, el sentido brillante de pensar que lo más simple es aquello que tiene más valor en la existencia, como también hay algunos, más bien los menos, a quienes a veces, se les transforma en una costumbre y viven encerrados en el pensamiento que no conocen lo que es la alegría, e incluso quisieran que se la explicaran para poder comprender lo que no sienten o no ven, lo bueno es que bastó que se les mostrara el instante mismo que estábamos compartiendo, para que reconocieran afectuosamente que el encontrar hablar con otros el mismo idioma y además ser comprendidos, era motivo para sentirse alegres.
Alguien acotó que su alegría, radicaba en seguir el camino que le tocó vivir y no mirar otro camino o crear uno que le hubiese gustado vivir, por que no existe más que aquel del cual es dueño y de él se aferra, lo disfruta y lo inicia cada mañana mirándose al espejo para reírse frente a él con alegría, haciendo muecas divertidas y desde el despertar enfrentar el nuevo caminar, contento.
LA ALEGRÍA DE VER Y ENTENDER ES EL MÁS PERFECTO DON DE LA NATURALEZA.
ALBERT EINSTEIN
LLegó el agradecimiento de María Luisa al grupo y dice así:
UN DÍA
AQUEL DÍA, ESE DÍA
UNA AMAPOLA DORMIDA DEJÓ VOLAR HACIA EL CIELO
SUS PÉTALOS REVESTIDOS DE TORNASOLES COLORES
LLEVANDO CONSIGO UN ALMA SOLITARIA
ESE DÍA ATESORÓ CADA SONRISA LIBRE, SIEMPRE SUAVE Y SINCERA
ESE DÍA
DÍA DE FLORES
DE MANOS ABIERTAS
MANOS GENEROSAS
QUE COLMARON DE FELICIDAD Y ALEGRÍA
A ESOS PÉTALOS VOLÁTILES
QUE REVIVIERON
Y AGRADECIERON ESCONDIDA
TANTA BELLEZA DESNUDA
ESE DÍA
QUEDÓ LA ESPERANZA BORDADA EN LAS AGUAS
Y EL CIELO SE VISTIÓ CON UN TRAJE NUEVO
sábado, 14 de mayo de 2011
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